Queridos hermanos/as queremos compartir con cada uno de ustedes nuestra experiencia vivida en el caserío de CHURCAS – COLASAY. Iniciamos nuestra aventura Paula, Mirtha, Emerson, Iván y Miguel (jóvenes del grupo M.A.R) a las 10:00 am., después de haber caminado dos horas, nos encontró el señor Asunción, quien nos acompañó hasta el lugar indicado. Eran las tres de la tarde y aún no llegábamos, debido a las lluvias nos tardábamos más…hasta que por fin logramos ver el caserío, nos dio mucha emoción llegar a este hermoso caserío, la gente nos estaba esperando y nos acogieron con mucha alegría para compartir éstos días tan importante.
Por la tarde iniciamos la celebración dando inicio al Triduo Pascual con la Cena del Señor, al siguiente día realizamos el viacrucis, la catequesis con los niños y jóvenes, visitamos a una familia que no pudieron asistir por motivos de salud…el día sábado culminamos con la Vigilia Pascual, que tuvimos que hacerlo por la mañana ya que teníamos que retornar nuevamente a Colasay. Nos sorprendió la presencia y participación de la gente, que a pesar de las lluvias asistían desde los lugares más lejanos con mucha fe, gozo y alegría…de poder vivir la Semana Santa unida como comunidad creyente…
Nosotros pudimos experimentar la necesidad que tienen de Dios, porque por ese lugar los sacerdotes llegan sólo una vez al año, aunque los catequistas celebran la liturgia los domingos, pero necesitan que alguien les anime para formar grupos así tener más apoyo porque prácticamente están solos…el hecho de haber compartido y celebrado con ellos la Palabra de Dios. Nos ha enriquecido y animado a seguir apostando y hacer visible su Reinado en cualquier lugar que nos encontremos.
Paula y Mirtha.
Junioras. Hijas de Cristo Rey
Por la tarde iniciamos la celebración dando inicio al Triduo Pascual con la Cena del Señor, al siguiente día realizamos el viacrucis, la catequesis con los niños y jóvenes, visitamos a una familia que no pudieron asistir por motivos de salud…el día sábado culminamos con la Vigilia Pascual, que tuvimos que hacerlo por la mañana ya que teníamos que retornar nuevamente a Colasay. Nos sorprendió la presencia y participación de la gente, que a pesar de las lluvias asistían desde los lugares más lejanos con mucha fe, gozo y alegría…de poder vivir la Semana Santa unida como comunidad creyente…
Nosotros pudimos experimentar la necesidad que tienen de Dios, porque por ese lugar los sacerdotes llegan sólo una vez al año, aunque los catequistas celebran la liturgia los domingos, pero necesitan que alguien les anime para formar grupos así tener más apoyo porque prácticamente están solos…el hecho de haber compartido y celebrado con ellos la Palabra de Dios. Nos ha enriquecido y animado a seguir apostando y hacer visible su Reinado en cualquier lugar que nos encontremos.
Paula y Mirtha.
Junioras. Hijas de Cristo Rey
1 comentario:
Cristo reina...queridas hermanas,.... me alegra que sigan luchando por extender el Reino desde el uno hasta el otro confin ahi donde muchos no pueden llegar y tanto necesitan de Cristo... las quiero mucho y oro por ustedes ánimo... Francy
Publicar un comentario